Pontevedra, 19.06.2012
Entrada n. 1529 do blog
ECOLOXISMO E CORRUPCIÓN,
por Xesús López Fernández
O hotel Albarrobico, o da fotografía, pode ser derrubado si é que se cumpre a sentencia recentemente dictada e que o define como obra claramente ilegal. Xa de hai anos viña Greenpeace traballando pola recuperación do espacio. Pero as sentencias que se ían producindo parecían destinadas ó non comprimento, a caterva política póndose sempre de perfil mostrando, como sempre, o seu desinterese pola execución de sentencias en relación coa profanación ecolóxica que o país está a sofrir.
En Pontevedra sabemos moito da presunta corrupción existente en asuntos como o devandito, estando a nosa ría a sofrire novas agresiós, novas obras prá conversión en solar das marismas de Lourizán. Pero as sentencias non se executan, o Estado de Dereito está aquí quebrantado, se damos por boas as palabras de Carlos Dívar, o presidente do TS actualmente cuestionado.
O Tribunal Supremo dí que viola a Lei de Costas e que pode ser demolido.
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4 comentarios:
¡Qué tristeza produce todo esto, amigo Xesús! Yo no sé qué más puede decirse de una nación cuyas instituciones quebrantan, tan alegremente, el estado de derecho. El complejo hotelero que hoy sacas a colación podría simbolizar lo mucho que debería derribarse, que, por una u otra razón, no se derriba.
Un cordial saludo.
Hola, Chinto:
Tristemente y como dice George Steiner --realmente lo decía hace ya unos veinte años--, el ecologismo ha nacido demasiado tarde y son los vándalos, la clase política casi siempre, los que se han propuesto acabar con el planeta.
Como en el caso del Algarrobico hay muchas sentencias pendientes de ejecución. Y me temo que Arias Cañeta haya sido nombrado para empeorar la situación, especialmente en la ría de Pontevedra, donde Rajoy nunha ha sabido hacer los deberes.
Un abrazo.
Pienso que lo peor del ecologismo es que prácticamente ha nacido ya con los mismos vicios de la clase politica: corrupción, lucro personal e "intercambio de cromos".
Tal vez tengas razón, Lobo, porque hay partidos menores, como aqui el puñetero Bloque, que han intentado usar el ecologismo como puro marketing, nada más.
Pero no entiendo que un ministerio de Medio Ambiente, que comenzó haciendo cosas en la medida en que algunos responsables han tomado sus deberes en serio, haya sido materialmente reventado por el poder en su esquizofrenia. Y reconvertido en este país en el tres-en-uno MARM, primero con la flojita de Rosa Aguilar, ahora con Arias Cañete, que anuncia más carga de irracionalidad.
Un saludo.
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