lunes, 5 de abril de 2010

LULÚ NON QUERE FLORES, DE LORES

Persoaxe simpático, activa, con saúde pra coser e leer, Lulú Vázquez, que na foto de La Voz de Galicia aparece paseando con membros da familia, acaba de cumprir cen anos. Memoria histórica.
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Pontevedra, 6.04.2010
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Entrada n. 2010 do blog
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LULÚ NON QUERE FLORES, DE LORES,
por Xesús López Fernández
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A noticia trascendeu. O alcalde Lores quería achegarse ó domicilio de Lulú Vázquez, símbolo dun século, pra se face-la foto e levarlle un ramo de flores. Pero Lulú dixo ¡non!: "A ese home non-o quero ter frente miña", comentou na ocasión. "¿Cómo vou recibir ó que chamou asesino ó meu pai, cómo pretende agora visitar á filla dun "asesino"?"
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Algo así foi a súa frase en relación co home que privou do nome dos Irmáns Vázquez Lescaille ó viario pontevedrés. ¿Lémbranse?. A rúa chamabase antes Secundino Esperón, un falanxista asesinado por medio de tiro na nuca, antes do 18.07.1936, que era ademáis unha boa persoa. Ah, pero no concello mandaban agora os comisarios políticos dispostos a desparasita-la nosa realidade, como tamén privaron á estrada de Marín do seu nome de Salvador Moreno, á par que convertían a zona vella en Gulag, o seu ideal urbanístico.
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Lulú Vázquez poderia darlle lecciós de historia a estos "comisarios e comisarias", que acaban de mete-la pata ata as illargas. En fin, parece que Lores non ten quen-o informe, eso que está no axuntamento, como concellal non electo, Bará, o comisario político que comezou coa vaina renominadora de certas vías. Siguen un enlace de La Voz e un artículo de Sagitario-Curro Volta, do ano 2002, que non ten desperdicio. Prós desmemoriados; pró propio Lores que si daquela metera a pata, agora facíao novamente, a xogare cos sentimentos e dignidade de Lulú Vázquez, que conserva a memoria aínda que o noso alcalde a teña perdido. ¿Alzheimer habemus?
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Impresentable señor Bará,
artículo de Curro Volta, 23.10.2002

Nunca imaginé que un polÌtico pudiera utilizar el Concello para convertirlo en una ikastola y lanzar infundios a los cuatro vientos tratando de justificar, falaz, torpe y torticeramente, sin que venga a cuento y sin necesidad, el cambio de nombre de calles, insultando, agraviando, mancillando e injuriando; en definitiva, ensuciando la memoria de los hermanos Vázquez Lescaílle y Fondevila, personas ya desaparecidas, causándole graves e irreparables daños morales a sus descendientes, miembros de conocidas, apreciadas y honorables familias pontevedresas.Naturalmente, el protagonista y promotor de semejante batiburrillo no podía ser otro que el edil naZionalista Luis Bará, quien colocándose el birrete rojo de la agresividad sobre esa testa en la que se le ha instalado un esfínter que le proporciona una selecta churra mental, aplica la más sibilina y refinada táctica a lo Goebbels del difama que algo queda, erigiéndose en una especie de tribunal popular, o si ustedes los prefieren en un Foucellas del siglo XX", utilizando para ello los dineros del contribuyente, incluidos, faltaría plus, los de las propias personas ofendidas. Evidentemente, esto es algo que un hombre de bien jamás hubiera hecho.Y es que el concejal de la cosa culta municipal que montó un carnaval de verano al que llama tiernamente Feira Franca sin relación alguna con la Edad Media; que pretendió anticipar el V Centenario de Santa María en medio siglo, y en un acto de la m·s pura bellaquería entra a saco en la página web oficial del Concello eliminando de ella ilustres nombres de la Historia de Pontevedra, cambiándola, ahora, investido de la ignorancia que le caracteriza quiere borrar del callejero, además de Salvador Moreno y Calvo Sotelo, el nombre de los Marqueses de Leis, por haber cometido el delito de ceder al Frente de Juventudes en el año 1944 el Pazo y finca de su propiedad, ubicado durante varios siglos en la llamada Granja de Campolongo -parte de cuyas tierras cedieron en los años 20 al ayuntamiento para la construcción del cuartel de Artillería y la avenida de Fernández Ladreda-, en cuyos terrenos la Delegación Provincial, con unos escasos recursos económicos propios de la época, construyó unas instalaciones deportivas que no tenía la ciudad, en las que se formaron y de las que disfrutaron durante casi dos décadas varias generaciones de pontevedreses -mens sana in córpore sano- muchos de los cuales militan hoy en distintos partidos políticos, incluido el BNG.Conviene recordarle a tan egregio compañeiro, que los últimos marqueses de Leis que habitaron y fallecieron en el Pazo de Campolongo, fueron, don Javier Pardo de Castro, de 36 años, comandante habilitado de Caballería, el 24 de agosto de 1940; y su padre, el Exc. Sr. Don Isauro Pardo Pardo, el 4 de agosto de 1943. En la actualidad la Real Carta de Sucesión del título de Marqués de Leis, expedido por Orden de 24 de enero de 1997, sin perjuicio de tercero de mejor derecho, pasa a doña María del Carmen Riestra y Rivero de Aguilar, cuyo primer apellido les dirá algo, ¿verdad?Sin embargo, no deja de sorprender, incluso a sus propios conmilitones entre los que se ha creado un cisma, la connivencia del grupo socialista con el BNG. En 1996 habían propuesto que se cambiara el nombre de Secundino Esperón -por cierto, falangista asesinado en Pontevedra en el año 1936, antes del 18 de julio-, y poner en su lugar el de Hermanos Vázquez Lesacaille, como así se hizo. Para mayor abundamiento, Teresa Casal -doña sensibilidades-, no ha tenido ningún empacho en aplaudir la propuesta de cargarse cualquier referencia a la época de represión franquista, a pesar de que ella no es precisamente la persona indicada para decirlo... Además, va de progre y considera necesario llevar a cabo estos cambios para cerrar de una vez viejas heridas y olvidar aquella época. Supongo que la edila debe estar en Babia aunque lo más probable es que su actitud sea producto de un sofoco, porque de las viejas heridas ya no queda ni la cicatriz. Aunque en la Boa Vila hay muchos casos, el referente más próximo lo tiene en Roberto Taboada Ribadulla -cuya familia sufrió en carnes propias las consecuencias de la Guerra Civil- que está casado con una pontevedresa de una destacada, conocida y apreciada familia falangista pontevedresa, y sus problemas no son otros que los propios de cualquier matrimonio, agravados ahora por la enfermedad del político. Ítem más: la sangre roja de sus padres corre ahora libremente por las azules venas de sus hijos sin ningún tipo de rechazo. Da la impresión de que las lenguas afiladas de determinados cenutrios lo que pretenden es volver a reabrir esas heridas y echarle sal, para así poder seguir celebrando su consabido martirologio.Y es que en un Estado de Derecho como el nuestro, gracias a Dios y a la Constitución, naturalmente, tiene cabida todo el mundo, incluso algunos individuos que son como una especie de ladillas humanas que se incrustan en el pubis de la Democracia, hasta el día que ésta, en una operación de limpieza de bajos utilice el insecticida de la verdad, la decencia y los votos, y los envíe desde el inodoro a su lugar de procedencia: O Rapadiño.

4 comentarios:

DonFiliberto dijo...

Lo del cambio de nombre de esta calle tuvo varios delitos:
Primero porque fue la revocación de un nombre dado en la democracia. Irmáns Vázquez Lescaille sustituía al nombre de Secundino Esperón.
Segundo porque estaba dedicada a varias personas, no a la trayectoria vital de una.
Tercero, porque a los hermanos Vázquez Lescaille Pontevedra le debe nada menos que la existencia de la radio.
Y cuarto se le bautizó a la calle con el nombre de Travesía do Rouco, cuando dicen los vecinos que el Rouco estaba situado más abajo.

xesús lópez fernández dijo...

O teu comentario deixa máis centrado o post. Incide, ademais, na cuestión da antidemocracia que preside e marca o talibanismo radical dos gobernantes locales.
Teño entendido que O Rouco era a costa toda de Cobián Roffiñac.

o blog de xesús lópez dijo...

Prós que non teñan en conta a denominación democrática das rúas, que tenten manter como mellor nome o de Gutiérrez Mellado que o do General Mola prá rúa antre Riestra e Michelena, habería que lles lembrare que esa rúa sigue sendo conocida como rúa do Chanchullo. Ese é o nome máis democrático, pero desta volta comeza a ser conocida por outro nome igualmente democrático: "rúa Lores de Arabia", que xa poucos pontevedreses deben quedar que non-o saiban.

o blog de xesús lópez dijo...

Es que Lulú, además, le ha cortado la meada al alcaldito Lores.